top of page

Optimismo y buenas vibras

Ser optimista es una tendencia para afrontar las situaciones de la vida de una forma más favorable, y te digo tendencia pues me parece que el optimismo es una actitud que se mantiene más o menos constante, pero no por ello infalible.

Personas que son optimistas pueden tener momentos de desconcierto, de no ver lo positivo en las circunstancias, de un bajón de pila.


Ser optimista no es una obligación. No por tener una visión esperanzadora y digamos hasta creativa de ver tu realidad, en la que puedas ver soluciones, aprendizajes y estés dispuesto a no tirar la toalla, quiere decir que debas ser siempre sonriente y emanando "la buena vibra". Luego pasa ¿no? que cuando alguien se ha caracterizado por un buen humor y tiene quizá la necesidad o ganas de externar una molestia, una tristeza, un mal rato le digan cosas como "uy ¿y ahora qué te pasó?" "Tu no eres así" "Que negativo" y quizá vas creyendo que debes justificar toda aquella emoción que no es "positiva".


Ser un optimista al 100% puede ser una pantalla o curita. ¿Te ha sucedido sentir que si eres buena onda, sonriente, alegre y positivo las personas a tu alrededor te aceptarán de mejor manera? Seguro que sí, nos gusta rodearnos de otros que inyectan una buena actitud en vez de los "quejosos", no obstante aquellas personas que "siempre están bien y al 100%" puede que en el fondo estén reprimiendo otros sentimientos o vulnerabilidad y sabes qué, la tristeza, la molestia muchas veces nos ayudan a conectar con los demás. Dejemos de creer que solo la sonrisa es pritt social o creadora de vínculos..


Otra situación que me viene a mente son aquellas personas "hipers" Hiper-activos, ocupados, workaholics, hiperfiesteros, esos que están como un rush constante...¿Qué aparece cuando haces pausa? Es como un cardiograma, generalmente después de una caída viene un pico hacia arriba. Y si dejas de estar en ese constante movimiento y energía acelerada ¿Qué descubrirías? En ocasiones estos "optimismos exagerados" son curitas a vacíos, temores o tristezas encubiertas.


Ser optimista es equilibrarse. Es reconocer que en la vida subimos y bajamos, nos enojamos y reímos, nos emocionamos y desilusionamos. Finalmente tener una tendencia de afrontamiento resiliente no es estar en un mundo rosa, donde todo te salga bien o nunca sientas la pérdida, el fracaso, la incomodidad. Optimista es realista, es expectativa congruente, es equilibrarse sabiendo o creyendo que allá, más adelante se pueden hacer ajustes, que mientras estás vivo hay chance para seguir intentando, porque eso sí, el optimismo no es una cuestión de mero pensamiento, es una acción y esfuerzo constante, es algo que se construye.



Así que en medio de estas épocas "covidosas" donde ya no sabemos ni cómo sentirnos, si se vale "quejarse" o nada más agradecer, si hay que mantenernos positivos o bajar a guardia, te invito a reflexionar ¿Cuál es tu filosofía de vida? ¿Cómo sueles afrontar los cambios y adversidades? Reconoce tus fortalezas, da paso a tu emoción y no olvides que ser positivo no es sinónimo del "siempre bien".


Poder ver "lo bueno en lo malo" la ventana que se abre cuando se cierra la puerta, a veces lleva tiempo, y está bien, y se vale.




91 visualizaciones1 comentario

Entradas Recientes

Ver todo
Post: Blog2_Post
bottom of page